El Impuesto sobre el Valor Añadido, o IVA, es la carga fiscal al consumo. Es decir, cada vez que alguien consume está, al mismo tiempo, pagando impuestos. Es el más importante de los llamados impuestos indirectos.
Si eres autónomo, ya estarás muy familiarizado con el IVA. Porque no sólo tienes que pagarlo cada vez que compras un bien o un servicio, sino que además tienes que recaudarlo cada vez que emites una factura a un cliente.
Lo que quizás no tengas claro es la diferencia entre dos distintos tipos de IVA que te afectan a la hora de pagar impuestos. Hablamos del IVA devengado y del IVA deducible.